Esencia y sérum. Sérum y esencia. Estos dos nombres te suenan ya, ¿verdad? Habrás leído sobre ellos informándote sobre la rutina de belleza coreana. Una rutina facial para mimar la piel del rostro y aportar todas las vitaminas e hidratación que necesita.
La rutina de cuidado facial coreana, como hemos comentado en post anteriores, ha llegado para quedarse. El rostro de los coreanos ha sido motivo de “envidia sana” durante muchos años, pero ya tenemos su secreto: Su rutina de cuidado facial diaria.
En esta rutina facial se trabaja por capas, o como le dicen fuera de España: Layering. Consiste en 10 pasos (algunos diarios, otros semanales y otros mensuales) que se dividen en 3 bloques: limpieza, cuidado e hidratación y protección.
El sérum y la esencia se recogen dentro del segundo bloque: cuidado e hidratación.
¿Qué es la esencia?
En cosmética coreana, la esencia es un producto poco concentrado, fluido y de rápida absorción que ayuda a preparar la piel tras la limpieza para que ésta pueda absorber correctamente los tratamientos que siguen a este paso.
El orden correcto de aplicación es tras la limpieza, es decir, después del tónico. En el caso que no utilicen tónico, puedes aplicarlo tras la segunda limpieza, antes del sérum.
¿Qué es el sérum?
Es el paso que aporta los ingredientes beneficios a la piel. Su textura es mucho más ligera que la de una crema hidratante, por ello, permite llegar a capas más profundas de la piel.
Su función es aportar el tratamiento necesario para tu tipo de piel, por eso, la concentración de activos en su fórmula es muy alta.
Para aplicar bien el sérum es necesario usar poca cantidad de producto. Normalmente, los envases de sérum vienen preparados para que solo utilices una pulsación. Si no es el caso, notarás que has utilizado mayor cantidad de sérum de la necesaria si al aplicarlo en el rostro se crean pequeñas bolitas.
¿Cuándo aplicar el sérum? El orden es después de la esencia y antes de la crema hidratante.
En muchas rutinas faciales de belleza no se utilizan todos los productos necesarios, ya sea por falta de tiempo, dinero, esfuerzo, etc. Sin embargo, cabe destacar que el resultado de la piel cuando llevas a cabo una rutina de cuidado facial completa se multiplica y tu piel luce y brilla por sí sola. Sin necesidad de aditivos ni maquillajes.
